Los abuelos de piedra es un montaje con una fuerte presencia de elementos didácticos que confronta, a través de un niño y su encuentro con algunos de los tesoros más emblemáticos de las culturas prehispánicas, concepciones como el respeto y la identidad.
Un trabajo que visualmente resultó muy atractivo, puesto que los personajes que fungen como piezas de museo, son parte de la escenografía: así encontramos al Calendario Azteca, al Chac Mool, a una Estela Maya y a Huehuetéotl.
La historia es simple, un niño berrinchudo, sobreprotegido y maleducado se encuentra a solas con los personajes antiguos y sin ningún respeto, patea a Chac Mool lo que enfurece a este y sin mayor cuidado confronta al muchacho, de ahí en adelante todos los ídolos cobran vida, y poco a poco van modificando la forma de comportarse del niño y su opinión sobre los objetos que se exponen en un museo.
La iluminación es cuidada, y un agregado más a la propuesta fue usar música en vivo, hecho que llamó poderosamente la atención del público y que; sin embargo, no se usó con suficiencia.
Con momentos cómicos y acertados, el montaje demuestra el esfuerzo y el compromiso que el grupo Ad Libitum perteneciente al Colegio Hebreo Maguén David, y dirigido por Enrique Sánchez, tienen, respecto a presentar obras de calidad, para los actores noveles.
Algunos problemas en cuanto a volumen, dicción y creación de personaje fueron, tal vez, los elementos que no permitieron que el montaje se desarrollase con la calidad que se esperaba, pero estamos ciertos que el esfuerzo y el trabajo rendirán frutos en las próximas experiencias escénicas de estos jóvenes.