//Isaac Richter
Por qué se suicida alguien? ¿Cómo es que la gente a su alrededor no se da cuenta que alguien se encuentra en tal estado de depresión que se quiere morir? En esta obra de la peruana Mariana de Althaus, Gabriel (Gabriel Mirensky) invitó a todos sus amigos a una fiesta en su casa y justo antes de que llegaran los invitados, tomó una pistola y se disparó en la casa, enfrente de su novia Andrea (Elian Wigisser). A lo largo de la noche, llegan los invitados: su mejor amiga Lola (Andrea Levín) que era casi como su hermana, su amigo Juani (Shai Grinberg), quien le dio la pistola antes de que sucediera, su amigo Iván (Salo Abadi), quien traicionó a Gabriel de una manera que nos vamos enterando (y él trae a Magda (Ariela Smeke), una desconocida que causa uno que otro revuelto en el grupo), su exnovia Sofia (Julie Abadi), con quien aparentemente reconectó antes del suicidio, Insecto (Daniel Romero), un vendedor de drogas a quien Gabriel le debía dinero, y Ximena (Sofi Lobatón), una vecina a la que no había invitado, pero que llegó para tratar de calmar al grupo.
Lo que vi en escena:
Alan Klapp, a quien hemos visto sobre el escenario en varias ocasiones en este Festival, se avienta a dirigir por primera vez con una propuesta visual muy clara y contundente, y un elenco que forma una mancuerna sólida. Las transiciones a los flashbacks podrían ser más fluidas, pero el concepto de ver a los actores en escena tomar una prenda de un perchero para entrar o salir del flashback es muy ingenioso. Su mayor acierto son esos momentos sin diálogo en los que permite que la música y las expresiones del actor en escena digan todo, cosa que habla de la fuerza de este elenco (que tiene elementos particularmente fuertes). Hacía falta adaptar el diálogo del guion, ya que los personajes constantemente dicen “ha habido” o “he hecho” (modismos que se usan más en España, aunque la autora es peruana), pero tienen uno que otro chiste mexicano que hacen que suene algo incongruente, pero fuera de eso, es un estupendo primer trabajo de alguien que queremos ver evolucionar dentro y fuera del Festival.
