En respuesta a “los diferentes tipos de terrorismo que han infringido daños significativos a comunidades israelíes en los últimos meses, como ataques contra la valla fronteriza, lanzamiento de artefactos incendiarios y explosivos, y disparo de cohetes”, de los que responsabilizó a Hamas, el Ejército de Defensa de Israel (FDI) inició el pasado sábado 14 de julio una operación defensiva en la Franja de Gaza - la mayor desde el Operativo Margen Protector de 2014 - haciendo blanco en más de cuarenta objetivos de ese y otros grupos terroristas que controlan el área palestina, incluyendo un túnel y bases de entrenamiento.
Desde la madrugada del sábado, Hamas y otros grupos terroristas lanzaron más de 174 cohetes y proyectiles de mortero contra el sur de Israel. La mayoría de ellos, más de un centenar, explotaron en áreas abiertas, sin provocar heridos ni daños materiales. Más de treinta fueron interceptados por la batería antimisiles Cúpula de Hierro. Varios proyectiles explotaron dentro de las comunidades del sur de Israel.
Asimismo, se anunció el despliegue adicional de baterías antimisiles Cúpula de Hierro en el sur del país y en el área del Tel Aviv y fueron convocados los reservistas de las unidades de defensa aérea israelí.
Al respecto, el portavoz de las FDI precisó que “el país está decidido a defender a los ciudadanos de Israel y está preparado para una variedad de escenarios que pueden intensificarse”, y advirtió que se tomarán las acciones necesarias en respuesta a cualquier ataque desde el enclave costero.
Cuatro cohetes fueron disparados desde la Franja de Gaza hacia Israel en las primeras horas del domingo; a pesar del anuncio previo de los grupos terroristas Hamas y Yihad Islámico de que se había alcanzado un alto el fuego con el Estado judío. La batería antimisiles Cúpula de Hierro derribó dos de los cohetes.
A pesar de que ese mismo día, se había alcanzado un alto el fuego con Israel en la Franja de Gaza varios misiles fueron lanzados desde la Franja de Gaza a territorio israelí por lo que la operación continuó.
En este contexto, durante su reunión semanal con el Gabinete, el Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, señaló el domingo 15 de julio que no aceptará un acuerdo de alto el fuego con los grupos terroristas palestinos en Gaza si este no incluye la condición de detener por completo el lanzamiento de cometas y globos incendiarios desde el enclave hacia el país, asegurando que no aceptarán ningún ataque y se responderá en consecuencia.
El lunes 16 de julio, Netanyahu visitó la ciudad de Sderot, en la frontera con Gaza, misma que ha sido el blanco principal de los ataque terroristas, donde aseguró que su gobierno está comprometido y es responsable por la seguridad de sus ciudadanos, advirtiendo que “por cien años Israel ha luchado en contra del terrorismo de forma aferrada y lo seguirá haciendo hasta que gane esa batalla”.
Desde marzo Hamas ha quemado más de 2 994 hectáreas de tierra y ha causado más de 750 incendios, un promedio de más de once incendios al día con barriletes incendiarios y globos explosivos, al tiempo que ha organizado manifestaciones semanales con el objetivo de infiltrarse en Israel y realizar ataques terroristas.
Fuente: www.tribuna.org.mx
