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¿Por qué la felicidad es el elemento más importante de Sucot?

Centro Deportivo Israelita, A.C.

Existen dos mitzvot (mandamientos) que caracterizan específicamente a la festividad de Sucot. El primero es el de construir una Sucá (refugio) y habitarla,dormir y comer en ella, durante una semana. La segunda es tomar cuatro especies (las especies de Sucot) y rezar con ellas. En Vayicra (Levítico 23:40) la Torá dice: “Y tomarás en el primer día la fruta de un árbol hermoso, ramas de palmeras, brotes de árboles frondosos y sauces del arroyo y te regocijarás frente a D-os, tu D-os durante siete días”. La Guemará en el tratado de Sucá (35a) explica este versículo de la siguiente forma:

“la fruta de un árbol hermoso” es el etrog (limonero); “las ramas de palmeras” son el lulav; los “brotes de árboles frondosos” son los hadasim (mirto), y los “sauces del arroyo” son aravos (hojas de sauce). Estos elementos constituyen las cuatro especies que usamos en Sucot.

El Sefer HaJinuj (324) explica por qué se nos dio el mandato de tomar las cuatro especies. Como introducción al tema, escribe que el hombre es influido por las acciones que hace rutinariamente. Sus pensamientos se dirigen hacia sus hábitos, sean buenos o malos. Por ello D-os nos ha dado tantas mitzvot (mandatos), porque entre más mitzvot tengamos, más mitzvot obedeceremos; y de esa forma, tendremos a D-os en nuestra mente todo el tiempo. No solo eso, estaremos todo el día haciendo acciones buenas por las que seremos recompensados. De esa manera, nos aseguramos también de dirigir nuestros pensamientos hacia la bondad, y enfocar nuestras mentes a conducir nuestras acciones hacia un camino justo y honesto.

La razón por la cual tomamos las cuatro especies es similar a esta forma de pensar. La festividad tiene un segundo nombre aparte de Sucot. Se llama también “Jag Hasif” “La Festividad de la cosecha”. Se le llama así, porque en esta época del año la cosecha es abundante y para la festividad se recolectan granos y frutas para traer a la casa.

La cosecha es naturalmente una época de felicidad y alegría. D-os nos ordena tener una festividad en estos tiempos de alegría para que pudiéramos dirigir nuestras emociones naturales de felicidad hacia D-os. De tal forma, que D-os nos dio una oportunidad más de servirlo únicamente por tener una reacción natural y sentirnos felices. Sin embargo, para evitar que dicha felicidad derive a expresiones meramente materiales y físicas tomamos en nuestras manos objetos que nos recuerdan que todo el regocijo de nuestro corazón debe ser dirigido hacia Su servicio. Las cuatro especies son objetos que en sí mismas causan placer y regocijo, sin embargo, el hecho de que sean ordenadas por D-os, nos hace darle un sentido profundo a esa felicidad que producen tanto las especies como la época.

El Sefer HaJinuj además agrega que las cuatro especies también toman un significado especial, ya que representan distintos órganos de la persona. El etrog representa el corazón, que es como menciona el Sefer HaJinuj “el asiento de la inteligencia”. Tomamos una fruta con forma de corazón para recordarnos que debemos servir a D-os con nuestra inteligencia. El lulav se parece a la espina dorsal, que es lo que sostiene al hombre. Tomamos el lulav en nuestras manos para recordarnos que todo nuestro cuerpo se dirige al servicio a D-os. Mientras que tomamos el mirto porque sus hojas se parecen a los ojos, y así recordamos que en estas épocas de alegría no debemos dejar que nuestros ojos se desvíen y se pierdan. Tomamos el sauce, cuyas hojas se parecen a nuestros labios para recordar que uno debe tener cuidado con sus palabras, y no permitir que se vuelvan impropias en este tiempo de alegría.