En su segunda actuación en Israel, la banda de rock alternativo exploró algunos de sus éxitos más populares en el Parque de Yarkon de Tel Aviv ayer por la noche, desafiando las presiones de los activistas del BDS que le exigían que cancele el show.
Radiohead inició el show con su éxito Daydreaming, de su último álbum, A moon shaped pool, y desafiando la presión ejercida desde hacía tiempo por el movimiento Boicot, Desinversión, Sanciones (BDS) para que cancele su actuación en el país.
Radiohead tocó un set de 27 canciones y dos grabaciones, incluyendo éxitos como No surprises, Creep y Karma police.
Yorke recibió una bienvenida mucho mayor que otros artistas que han actuado en Israel, no solo por su legendaria posición en el negocio, sino por su decisión de desafiar la presión ejercida por el movimiento BDS con el objetivo de detener su actuación.
A pesar de las campañas de difamación online en su contra, las acusaciones de que apoyaba un Estado de apartheid, y las protestas fuera de sus conciertos, Yorke decidió seguir adelante con su actuación, constituyendo otro obstáculo para el movimiento de boicot.
