Hace 75 años, en 1950, el Centro Deportivo Israelita abrió sus puertas por primera vez para dar vida a un sueño comunitario. Desde entonces, cada rincón del Dépor se ha convertido en escenario de historias que combinan deporte, cultura, festivales, competencias, exposiciones y encuentros que han unido a familias, amigos y generaciones enteras en un solo espacio.