¿Qué es la cartonería? La cartonería es una artesanía que consiste en la elaboración de figuras
utilizando papel con engrudo. Hay diferentes técnicas para elaborar una figura: Utilizando una estructura hecha con carrizo (para poder usar este material, el carrizo debe ser flexible, necesita estar verde o bien, se pone a remojar un día antes para garantizar su fl exibilidad) y cubriéndola con papel y engrudo. – Utilizando una estructura hecha con alambre recocido (un alma de alambre, se dice) y después cubriéndola con papel y engrudo hasta alcanzar la dureza necesaria. Esta actividad se ha desarrollado en distintos lugares de México como Guanajuato, Estado de México, Ciudad de México, Michoacán, Zacatecas, Puebla. Fue traída de España con los frailes en el proceso de evangelización a mediados del siglo XVI, con influencia de las fallas de Valencia. Con esta técnica se elaboran muñecas articuladas, mamertos, esqueletos, catrinas, máscaras, cascos, sonajas, caballos y alebrijes. Su producción se va marcando de acuerdo a la época del año: en Semana Santa se hacen diablos de todos los tamaños, para quemar y como decoración; para el Día de Muertos, los talleres de los cartoneros se nos llenan de cráneos, esqueletos, catrinas. En carnavales se hacen máscaras. Para Día de Reyes, las muñecas y caballos. En fin, son inmensas las posibilidades de lo que se puede hacer con esta técnica. De las figuras hechas con esta técnica son las muñecas articuladas llamadas también Lupitas, Peponas, Gorditas. Se dice que se comenzaron a elaborar allá por el siglo XIX, como una copia de las muñecas de sololoy, que eran muy caras y poco accesibles para la población en general, entonces los artesanos mexicanos comenzaron a hacerlas de cartón, decoradas con una especie de traje de baño pintado sobre la muñeca que simula la ropa interior. Los alebrijes han cobrado una gran popularidad en estos últimos años, la creación de ellos se le atribuye a Pedro. Una versión cuenta que Pedro Linares enfermó, teniendo alucinaciones y en una de ellas vio a los alebrijes y de ahí comenzó a elaborarlos. Pero hay otra versión: José Antonio Gómez Rosas, pintor mexicano a quien llamaban “el Hotentote”, dirigía la Academia de San Carlos y anualmente se realizaba un baile temático, le encargó a Pedro Linares que le hiciera alebrijes, ¿qué eran? Como los diablos que hacía, pero con alas y formas de animales. Lo que es cierto, es que el trabajo de Linares era muy característico pues sus judas tenían una decoración muy particular, llena de colores y texturas.