Este mes ha sido muy variado en este grupo de Adultos, unimos dos festejos muy importantes para
festejar con manteles largos el Día de las Madres y el Día del Maestro con Beyajad, la generación que hizo posible el sueño.
“D-os no podía estar en todas partes a la vez, por eso creó a las madres”. Y yo le añadiría a esta frase para las abuelas, las bisabuelas y a las tatarabuelas, y es por eso que tuvimos el gusto de festejar a estas lindas mujeres, guerreras en sus casas y fuera de ellas, con la fuerza de voltear un camión de carga si es necesario, y con la delicadeza de acariciar un pequeño cuerpo y darle la tranquilidad que solo una madre sabe dar, con la exactitud de hacer rendir los recursos para una gran o pequeña familia, con la inteligencia de desarrollarse en una carrera sin descuidar ni un detalle del crecimiento de los retoños de su vida, con la bendición y toque que D-os comparte con ellas para saber que pase lo que pase, nuestra gran amiga, es nuestra madre. El quinteto Los Imperiales amenizó este festejo por partida doble y pasamos una tarde llena de sorpresas y de alegría.
Dicen que el que enseña, aprende dos veces y nunca es tarde para aprender, y así arrancamos el festejo del Día del Maestro con la entrega de regalos que esta población año con año le brinda a todos sus maestros un detalle en agradecimiento a la entrega, pasión y dedicación que todos y cada uno de ellos muestran cada martes y jueves durante sus clases. Beyajad cuenta con 18 actividades diferentes que se dividen entre actividades físicas y culturales, y la importancia de reconocerlos a todos sin ningún tipo de distinción. Gracias por haber aprendido el arte de enseñar y ejercerlo cada día.
Gracias a todos los involucrados por su apoyo y dedicación para que Beyajad siga viviendo grandes momentos.