En las últimas décadas, los científicos han mostrado
gran interés por investigar los efectos benéficos de la música en los niños.
La iniciación musical puede comenzarse desde el vientre materno, ya que los niños pueden aprender sonidos y ritmos, simplemente si escuchan canciones infantiles o los padres dan palmadas mientras suena la canción.
Posteriormente, escuchar música con los niños, produce cambios a nivel fisiológico, desarrollando un fuerte vínculo afectivo, que estimula su inteligencia emocional. Asimismo, a nivel psicológico, despierta, estimula y desarrolla emociones y sentimientos.
Los estudios reflejan que la música favorece la capacidad de los menores para la atención y la concentración, potencializando su rendimiento en el colegio. La música estimula la memoria, el análisis, la síntesis y el razonamiento, y por lo tanto, el aprendizaje.
A los niños no se les debe limitar a escuchar exclusivamente canciones de cuna, porque también tienen capacidad para disfrutar y recordar música clásica o moderna. Escuchar distintos tipos de música, les ayudará a aprenderla, a reconocerla y a disfrutarla, fomentando la memoria de todas las canciones que escuchan.
En general, se recomiendan canciones de letras sencillas y repetitivas para bailar. Sin embargo, no es conveniente restringir al niño el acceso a la música, está comprobado que desde la infancia, los seres humanos son muy receptivos a la música clásica de fácil estructura y de corta duración, propiciando que el niño entienda que la música es una fuente de diversión.
La educación musical tiene como objetivo el descubrimiento y desarrollo de las capacidades expresivas, musicales y psicomotoras del niño, que permitan la elección de un instrumento musical, según sus preferencias y aptitudes.
En la mayor parte de las escuelas de música, los niños comienzan desde edades tempranas con la iniciación musical. Aprenden a hacer ritmos con la voz o con partes del cuerpo, aprenden cuándo una nota es alta o baja y, aprenden a escribir o a reconocer las notas musicales mediante juegos.
De una forma general, los profesores de música para niños trabajan con:
El desarrollo de la voz.
El contacto con las fuentes sonoras a través de materiales diversos: objetos e instrumentos.
El reconocimiento y la representación del sonido respecto a su duración, intensidad, altura, timbre, etcétera.
El desarrollo de la percepción auditiva.
La utilización del movimiento como medio de expresión y sensibilización motriz, visual y auditiva, para conocer el propio cuerpo, desarrollar el sentido rítmico y fomentar las relaciones sociales.
A partir de los 6 años, en la mayor parte de las escuelas de música suelen pasar de la iniciación musical a la formación musical en la que el niño toma contacto con el instrumento musical.
Los expertos dicen que la edad más adecuada para que el niño se inicie en la música y aprenda a tocar un instrumento musical es a partir de los 5 años. El aprendizaje de la música tiene muchos beneficios en los niños, pero jamás debe ser impuesto por los padres. Si el niño lo elige libremente podrá desarrollar mejor sus aptitudes.
Es por todos estos beneficios, que invitamos a todos los padres de nuestros pequeños Socios a que integren a sus hijos al maravilloso mundo de la música dentro de nuestra Academia de Música Sound City CDI.
Mayores informes en el Comité de Actividades o a las extensiones 506 y 518.