Un grupo de mujeres judías
estadounidenses, pertenecientes al grupo humanitario israelí IsraAID, sufrieron agresiones verbales antisemitas por parte de voluntarios de otras organizaciones y un funcionario de la organización internacional, en un campo de refugiados de las Naciones Unidas ubicado en la isla griega de Lesbos.
Tras los insultos recibidos, un guardia de seguridad de la ONU intervino y, en lugar de calmar a los agresores, se unió a la agresión verbal y les exigió que salieran del campamento. Ante el reclamo de una de ellas, el hombre le dijo que los judíos son todos iguales, asesinos, y las amenazó con arrestarlas. En ese contexto una integrante árabe israelí, miembro de IsraAId, las ayudó y notificó a las autoridades del lugar. Ante esto, el guardia de seguridad fue destituido.
El campamento de Lesbos es uno de los muchos establecidos por la ONU para ayudar al flujo de refugiados procedentes de Siria, Irak, Afganistán e Irán, y varias organizaciones de ayuda están activas allí.
IsraAID, fundada en 2001, es una organización no gubernamental sin fines de lucro comprometida con la prestación de ayuda en desastres para salvar vidas y apoyo a largo plazo. Durante más de una década, sus equipos de médicos profesionales, expertos postraumáticos y movilizadores de la comunidad, junto a escuadrones de búsqueda y rescate han sido los primeros en dar respuestas humanitarias importantes en situaciones de desastre en el siglo XXI, siendo su misión apoyar de manera eficiente y satisfacer las necesidades cambiantes de la población en sus esfuerzos por pasar de la crisis a la reconstrucción / rehabilitación, y, finalmente, a una vida sostenible.
Fuente: www.itongadol.com