Alan Gross, el empresario estadounidense que fue encarcelado durante cinco años en Cuba por intentar

ayudar a su comunidad judía, dijo tras la muerte del líder cubano Fidel Castro: “La historia nunca lo absolverá”.

La muerte de Castro a la edad de 90 años fue anunciada el viernes por la noche por su hermano, Raúl, actual presidente de Cuba.

“La historia nunca lo absolverá. Pero quizás ahora se oirán las voces de Cuba. Habla, Cuba”, twiteó Gross poco después de la muerte de Fidel Castro.

En otros tweets subsiguientes, pidió sin embargo a Estados Unidos que levante su embargo en Cuba. Cuando fue arrestado en 2009, Gross, de Potomac, Maryland, trabajaba como subcontratista de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, (USAID) creando acceso a internet para judíos cubanos.

Gross fue liberado en diciembre de 2014 como parte de un intercambio más amplio en el que tres cubanos condenados por espionaje fueron liberados de las cárceles estadounidenses. El mismo día de aquella liberación, el presidente Barack Obama anunció renovados lazos con la nación comunista.

Gross ha pedido que se mejoren los lazos entre Estados Unidos y Cuba. En septiembre, respaldó a la candidata presidencial demócrata Hillary Clinton, citando en parte su compromiso con la nueva apertura del gobierno de Obama a Cuba.

El actual presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, en cambio, parece dar señales contrarias: amenazó con deshacer las relaciones diplomáticas “si la isla no se democratiza”.

Fuente: www.aurora-israel.co.il

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