El domingo 8 de junio, se presentó el Grupo Milim de Juventud CDI con la obra,
Los amantes no se buscan, de la escritora mexicana Alejandra Trigueros bajo la dirección de Daniela Yoffe.
La puesta es una comedia que usando la picardía mexicana, lleva al público a disfrutar de los enredos amorosos de dos matrimonios que tratan de hacer lo mejor para que no quede expuesta la problemática amorosa que cada pareja vive.
María, mejor amiga de Pupy, le confiesa que se encontró al amor de su vida, y este le ofreció dar clases en una universidad, mientras su esposo Felipe, mejor amigo del esposo de Pupy, Víctor, conviven tomando whisky y comiendo palomitas sin sospechar que este maestro de arte se convirtió en el amante de María. La situación se torna más compleja cuando los esposos se enteran que dicho profesor es amante de ambas mujeres. El enredo es descubierto porque este obsequia un cuadro a Pupy, misma acción que realizó con María, finalmente y después de muchos enredos, Víctor y María terminan haciéndose amantes.
Con esa historia de fondo se expone, en medio de momentos hilarantes, la conflictiva relación de ambas parejas.
El montaje expone un trabajo de dirección un tanto plano, que se hace patente en el trabajo de actuación, ya que los actores no matizaban del todo sus personajes en distintos estados de ánimo presentes a lo largo de la obra, resultando un tono monótono.
La iluminación al igual que la escenografía, eran un tanto confusas y no se logra del todo que el público perciba los dos espacios que propuso la directora.
Cabe señalar, que la actuación de la actriz que representa a Pupy, logró arrancar, en distintas ocasiones, las risas del público, lo que deja claro que fue el trabajo actoral más sólido.
En general, la obra gustó a los espectadores, se disfrutó y no deja de ser un trabajo planteado con seriedad, que dejó a algunos con una idea rondando por su mente: “Los amantes no se buscan… Se encuentran”.