El próximo jueves 30 de octubre, tendremos la salida
mensual del grupo Balagán, en esta ocasión visitaremos El Museo Anahuacalli, la Plaza de la Conchita, la Parroquia de San Juan Bautista, y terminaremos en la Feria del Chocolate en el Centro de Coyoacán. Te comparto un poco de la historia de la Plaza de la Conchita, que es uno de los lugares que visitaremos.
Plaza de la Conchita
Después de la conquista, Hernán Cortés comenzó a edificar diversos lugares, están las casonas antiguas, la Plaza e Iglesia de Santa Catarina (Coyoacán), la Iglesia de San Juan Bautista (Coyoacán), y especialmente el Antiguo Palacio del Ayuntamiento de Coyoacán, que en aquel entonces era el Palacio de Hernán Cortés precisamente, entre otros. Cuando Hernán Cortés llegó a lo que hoy es México, se cautivó por La Malinche, ella se convirtió en su mujer, así como su traductora. Hernán mandó construir una casa, que ella prefirió en rojo, y la casa tenía un jardín amplio. El barrio se preservó, se mandaron construir calles y casas todavía en la época virreinal, resplandeció en el siglo XIX.
Coyoacán recibe su nombre del náhuatl “Coyuhuacan”, compuesto por “Coyu”, coyote y “huacan”, gente, por tanto ‘gente de los coyotes’. En donde ahora se encuentra la Iglesia de la Conchita, estaba un adoratorio tolteca, así como 159 tumbas, esto se descubrió en mayo de 2013.
Al igual que la iglesia, la plaza se construyó al mismo tiempo con piedra volcánica sencillamente labrada para adoquinar la plaza, se cree que la plaza era el jardín de la casa de Malintzin, y la iglesia era la capilla de ella también. Después de fallecer La Malinche, la capilla y el terreno fueron heredados a sus descendientes. La plaza fue cercada contra ataques y por ser terreno de la familia.
Al igual que los otros barrios, el parque es preservado por la delegación Coyoacán con los impuestos recaudados.
Existen varios rumores alrededor de estas edificaciones, pues son las más antiguas de la Nueva España, algunas leyendas cuentan que se aparece La Llorona, que aseguran es la Malintzin, otros afirman que Malintzin se casó con Cortés en esta hacienda, pero a los dos años de casados, él la abandonó, y por eso afirman que cualquiera que se case en la Conchita, tendrá un matrimonio corto. Afirman que también se ven espíritus danzando afuera de la capilla a modo tolteca.
Ven con el grupo Balagán a este paseo, en donde la parte recreativa y cultural van de la mano, acércate al Comité de Actividades para mayores informes e inscripciones.