El Libro o Meguilá de Esther relata que poco antes de que llegaran a su fin los 70 años del destierro de Babilonia, gobernaba en Persia el rey Asuero, casado con la reina Esther, de quien desconocía su origen judío.
Amán, primer ministro de este monarca, despreciaba tanto a los judíos que quería exterminarlos. El rey aceptó su proposición y estableció un decreto que se envió a las 127 provincias bajo su mandato, en el que se ordenaba la matanza de todos los judíos, hombres, mujeres y niños, el 13 del mes adar. Sin embargo, entre los judíos sobresalió la figura de Mardoqueo, tío de la reina, quien se acercó a ella solicitándole que intercediera por su pueblo. Esther le pidió que reuniera a los judíos de la capital del imperio, Shushan, para pedirles que ayunen por ella.
Esther aclaró ante su esposo su identidad religiosa y pidió que librara a su pueblo de la tragedia. Asuero aceptó las súplicas de su esposa y dio su autorización para que los judíos se defendieran. El 14 de adar estos derrotaron a las fuerzas enemigas.
La palabra Purim proviene del acadio puru que significa suertes o sorteo y se refiere a la suerte que echó Amán para decidir el día en que los judíos serían exterminados.
La Meguilá de Esther se lee dos veces, una por la noche y otra por la mañana del día de la fiesta. Las leyes religiosas indican que se deben intercambiar regalos entre amigos y vecinos, y dar presentes a los pobres y necesitados. “... como días en que los judíos tuvieron descanso de sus enemigos, y el mes que les fue cambiado de duelo en regocijo, y de luto en días de fiesta; haciéndolos días de banquete y regocijo, y de enviar presentes los unos a los otros, y de hacer dádivas a los pobres” (Esther 9:22).
Se acostumbra celebrar con una comida a la que asisten los niños con disfraces y en donde se representan obras de teatro relatando la historia de Purim. En muchas comunidades judías se difundió la costumbre de llevar a cabo desfiles y celebraciones de tipo carnavalesco que representan la alegría del día.
En la actualidad Purim continúa siendo un día de fiesta. Purim seguirá ocupando un sitio preponderante en la historia del género humano.