Dentro de unos años, es posible que se viaje en un coche sin nadie al volante. Este automóvil del futuro
cercano necesita una gran cantidad de componentes complejos, algunos ahora en fase de desarrollo en empresas israelíes y laboratorios académicos.
“Usted será capaz de ir a, digamos, a París o Tokio, alquilar un coche, pasar una tarjeta y decirle que vaya donde quiera. Usted no tendrá que conocer la zona o las normas de tráfico”, dice el Profr. Zvi Shiller, fundador del departamento de ingeniería mecánica y mecatrónica de la Universidad de Ariel y director del laboratorio para Robótica y Vehículos Autónomos.
El mayor beneficio será un menor número de accidentes de tráfico que el que tenemos hoy – causando más de 30,000 muertes al año solo en los Estados Unidos – eliminando el error humano en la conducción. Pero eso requiere un coche muy inteligente.
En el Laboratorio de RAV, Shiller y sus estudiantes están desarrollando algoritmos para modular automáticamente la velocidad y la dirección en respuesta a la constante evolución impredecible del estado de las carreteras. La investigación ha recibido el apoyo de los ministerios de Ciencia, Transporte y Defensa, la Fundación Paslin, la Agencia Espacial Israelí, y General Motors.
Fuente: www.aurora-israel.co.il
