Durante los últimos años la vida de las familias ha cambiado de muchas formas, una de ellas es que los niños de
hoy no son los mismos que los de antes, vienen con otra mentalidad (son niños tecnólogos). A partir de esta afirmación, son muchos los practicantes que se quedan en casa jugando, (videojuegos, tabletas, computadora, etcétera), en vez de ir a entrenar, eso genera un problema.
La realidad, es que los juegos de video y el Internet pueden entusiasmar más al niño que estar sudando, entrenando y esforzándose físicamente y mentalmente en un salón de Tae Kwon Do. Entonces con este reto, debemos superar estas atracciones y darle un lugar, pues si bien es cierto que la tecnología es algo inevitable, no podemos perder el norte de lo que puede convertirse en adicción e incluso vicio.
¿Qué hacer para estar a la par con esta época?
Es sumamente importante hacerles entender que la parte física y mental que se desarrolla en el Tae Kwon Do, no solo sirve para ganar medallas y premios, sino que le sirve para mantener una salud óptima.
No presionarlo a que sea un campeón, no todos pueden serlo. Son demasiados factores para que un alumno sea o no el medallista de oro. En ese sentido, el Tae Kwon Do es un árbol lleno de conocimientos.
Brindar apoyo y aliento cuando las cosas no salgan bien en el entrenamiento, examen o competencia.
Fundamentalmente, observar, preguntar y escuchar a su hijo para saber cómo está en cada momento y a partir de esa información, actuar en consecuencia. Por ejemplo, felicitándole cuando lo hace bien y animándole cuando no es así. Y mantener un diálogo con el entrenador para contribuir en el desarrollo deportivo de su hijo:
• Introduciendo metas reales individualizadas que tengan que ver con las potencialidades del niño
• Promoviendo juegos recreativos, actividades al aire libre, incluso dar responsabilidades al alumno de Tae Kwon Do según su destreza
• Colocar horarios para los juegos de video, y siempre que se consideren secundarios
¿Cuáles son las ideas erróneas más comunes con este deporte?
Es muy común que se inscriban a Tae Kwon Do para “aprender a defenderse”, cuando en realidad están haciendo un bien en su vida, que llevarán de ahora en adelante, pues el practicante de Tae Kwon Do lleva valores y forma a personas en muchos aspectos.
Los padres de familia deben tomar en cuenta que si a su hijo lo inscriben en Tae Kwon Do, es porque trata de una disciplina que lo ayudará en cuerpo y alma.
Y como padres de familia, es importante prestar atención a señales que pueden afectar el desarrollo deportivo; por ejemplo, si se considera más importante la actividad deportiva que el propio deportista, suelen generarse mayores problemas afectando negativamente el rendimiento. Así, como padres estamos muy motivados e implicados con un deporte solemos fomentarlo a nuestros hijos. Si esto se hace de forma insistente puede provocar saturación y por tanto, desinterés en el joven deportista.
Otro aspecto que influye y que está relacionado, es la impaciencia que los padres por ver mejoras en el rendimiento de su hijo, lo que en muchas ocasiones, genera que los padres continuamente estén dando instrucciones o incluso entrenen aparte a sus hijos.
Este aspecto es el más negativo, ya que suele producir sobreentrenamiento, y por tanto, agotamiento físico y mental, disminuyendo el rendimiento e incluso desembocar en el abandono de la práctica deportiva.
¿Cómo apoyar a mi hijo en el Tae Kwon Do y ganarle la batalla a los videojuegos?
Los padres de familia debemos saber integrar el Tae Kwon Do en las actividades diarias, y sabiendo en qué consiste, cómo se trabaja, de qué se trata, acercarnos y platicar con el entrenador, pidiendo consejos, mientras el niño vea interés en sus padres, el niño se verá motivado a estar en el deporte y así trabajar juntos hacia un mismo camino.
Padres, dedicarle más tiempo a tus hijos es demostrarles interés a sus propios intereses, mejorará la comunicación y participación activa del taekwondoin.
Que el resultado de su desempeño no sea determinante de futuras situaciones, entender que lo que hoy no se logra con esfuerzo y preocupación se logrará en un futuro, la vida de un taekwondoin es larga, así que siempre tendrá oportunidades para lograr sus metas.
Comprender que los niños no son adultos en miniatura, y mucho menos la continuación de tu participación deportiva, cada uno es un individuo en particular con sus propias metas y fines, características y preocupaciones.
Dejar, ya mismo, el concepto de ganadores y perdedores en el deporte, el niño se verá desmotivado cuando se le dice que es un perdedor, cuando dentro del tatami es todo un ganador, estar en una competencia no es nada fácil, el papá debe ponerse en los zapatos de su hijo.
Recordar siempre que el trabajo en equipo logra frutos más intensos, por lo tanto, una buena comunicación con el entrenador es primordial, así como con los padres de familia.
Conoce el programa de trabajo que lleva el sabonim (profesor) para trabajar en equipo y poder ayudar también a tu hijo. Valora el progreso deportivo de tu hijo. En este sentido, es importante que los padres asuman su rol de padres y no de entrenadores.