Durante estos días el aislamiento social no es el mismo para todas las personas.
Hay algunas que lo llevan de la mejor manera; pero otras suelen verse afectadas por este tipo de situaciones, llegando a la ansiedad y la desesperación. Es por eso que se recomienda se mantengan ocupadas en casa, con trabajo, juegos, actividades domésticas o algún pasatiempo.
Algunas personas optan por hacer yoga o meditación, en este caso hablaremos de la meditación como un medio para relajarte y hacer del aislamiento algo más llevadero. La meditación es tan distinta como cada persona, depende de cómo se perciba y el sentido que le dé. Sin embargo, a grandes rasgos, se define como un estado de conexión con la esencia más pura del ser, donde, mediante un entrenamiento de la mente, se estimula la energía y se contemplan los elementos más importantes. Llevando a cabo esta práctica, su efectividad ha hecho que, desde monjes budistas hasta ejecutivos y empresarios de occidente, la adopten como un mecanismo depurador que selec- ciona lo que debemos dejar y lo que no.
El objetivo de la meditación depende de lo que cada persona busque en ella, sin embargo, algunos de ellos son los siguientes:
*Relajamiento: liberar la ansiedad y el estrés para llevar al ser a un estado de bienestar.
*Ingenio: limpiar la mente para hacerla más creativa.
*Conciencia: desarrollar la relación de unidad con todo lo que nos rodea. Abrir los ojos ante el mundo y entender cuál es nuestro lugar.
*Descanso mental: calmar la mente y liberarla de las preocupaciones constantes y los pensamientos que nos agobian.
*Salud: estimular el sistema inmune y desarrollar los mecanismos de autocuración que nacen en el interior.
*Concentración: potenciar la concentración y memoria.
Sin duda esta disciplina a nivel psicológico nos ayuda mucho a entender nuestras emociones, nos brinda bienestar mental y es un gran apoyo en estos momentos en donde debemos mantener la calma y ser pacientes.