El Globo Viajero

Infantil A
Shamosh

Había una vez un globo rojo con un hilito blanco que estaba en una tienda. Nadie lo compraba, y pasaba el tiempo muy triste, mirando por la ventana y soñando con volar por el mundo.

Un día, después de mucho tiempo, una señora entró a la tienda y lo compró. Pero apenas salió, lo soltó sin darse cuenta, y el globo se fue volando muy alto. Pasaron los días y, después de mucho tiempo, un niño lo encontró. Lo agarró con cuidado y se hizo muy famoso, porque el globo… ¡sabía hablar!

Iban juntos por todas las calles y por todos los países. Visitaban México, Israel y muchos lugares más. En cada sitio, el globo hablaba con la gente y todos lo conocían.

Era tan famoso que la señora que lo había soltado se arrepintió de haberlo dejado escapar.

El globo era muy feliz, porque desde que estaba en la tienda tenía un sueño: quería viajar. Y lo logró, conoció el mundo y cumplió su deseo.

Al final, todos querían tener al globo, así que el niño decidió hacer una rifa. Dijo: “El que se lo gane, se lo queda”.

Y así termino la historia del globo rojo con hilito blanco, el globo que hablaba y que fue feliz para siempre.

Pero los que nunca quisieron comprarlo, ni siquiera se dieron cuenta de que ese era el globo que habían dejado pasar… y no supieron que era un globo muy, muy especial.