//Isaac Richter

Cuando viajamos en transporte público, rara vez conocemos a la gente que comparte el transporte con nosotros. Es más, rara vez nos acordamos de esa gente una vez que nos bajamos del vehículo. Los jóvenes actores Jacobo Palombo (Judíos mal) y Daniel Nates (Reloj contra tiempo) se avientan a dirigir por primera vez a estos jóvenes actores de Macabi Hatzair en una puesta en la que conocemos a diez personajes que se encuentran en el mismo autobús, que se ha perdido en algún bosque oscuro que nadie conoce. La conductora ha perdido el control del autobús y ahora estos personajes tendrán que enfrentar la situación en la que están, y los pecados que cada uno ha cometido: los celos, la lujuria, la vanidad, la ira, creo que entienden por dónde voy.

Lo que vi en escena: Un elenco de actores muy comprometidos a las caracterizaciones que buscan en sus personajes, cada uno encontrando algo único en su personaje. El autobús está hecho de sillas apuntadas hacia el lado derecho del escenario y un cartón que simboliza la pared del camión, que es justo lo que se necesita para que la imaginación del público llene los espacios en blanco y se meta en la historia. Los directores le dan bastante lugar a sus actores para que exploren con sus personajes, con mínima interferencia de los efectos a su alrededor. Las moralejas del final se sienten como algo que alguien les obligó a incluir al final de la obra (ya que el tono cambia a algo que no parece ser parte de la obra), pero hasta ese momento es bien divertida y hasta logra ser conmovedora. Un prometedor comienzo para estos dos jóvenes actores (que aún no son adultos, no hay ningún adulto involucrado en esta producción) que se atrevieron a montar una obra de teatro.

Diez en el autobús. Jueves 11 de junio, 21:00 horas

Festival de Teatro Habima 2015