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¡Tu cuerpo necesita la grasa para funcionar!

Centro Deportivo Israelita, A.C.

Los lípidos o grasas además de regular la temperatura y proteger nuestros órganos nos ayudan a absorber nutrimentos, a que nuestro cerebro funcione de manera adecuada cerebro, a ser precursor de hormonas y a enfrentar procesos inflamatorios. Dentro de la moda e industria de las mil y una dietas, encontramos aquellas ricas en grasa, bajas en grasa e incluso algunas que recomiendan que no consumamos grasa en lo más mínimo. La Academy of Nutrition and Dietetics junto con otras importantes instituciones de salud como la American Heart Association recomiendan un consumo del 20 al 35 por ciento del total de calorías del día. Todos los tipos de grasa aportan 9 kcal y se recomienda la siguiente distribución: Los Ácidos Grasos Saturados (AGS) menor al 7 por ciento: en su mayoría, la grasa contenida en productos de origen animal y algunos vegetales: carne roja grasosa, piel de pollo, crema, mantequilla, manteca vegetal, productos ultraprocesados, aceite de coco y aceite de palma. Los Ácidos Grasos Trans (AGT) son aquellos que químicamente se le agregan a los productos para darles textura o consistencia, son aceites parcialmente hidrogenados que al consumirlos en exceso se elevan los niveles de LDL y VLDL en nuestro organismo, pudiendo generar placa aterogénica (aquella que se pega en nuestras arterias y obstruye el flujo sanguíneo). Los Ácidos Grasos Monoinsaturados (AGMI) del 15 al 20 por ciento son ricos en Omega 6, y está comprobado que éstas podrían reducir los niveles de colesterol en el torrente sanguíneo. Las podemos encontrar en el aceite de oliva, de canola, de cacahuate y de ajonjolí, o en las oleaginosas : cacahuates, almendras, pepitas y aguacate. Revisa que no tengan aceites añadidos ni sal para que el beneficio sea al 100 por ciento. Al utilizar los aceites para cocinar en caliente es importante tomar en cuenta el punto de humo de cada uno, ya que al ‘quemarse’ se destruyen las propiedades cardioprotectoras (fitoquímicos) y se generan radicales libres que dañan nuestras células.

ACEITE   PUNTO DE HUMO °C

Cártamo                 232

Cacahuate              232

Soya                      232

Coco (ojo con las grasas saturadas)  232

Canola                  223

Girasol                  198

Oliva                    190

Los Ácidos Grasos Poliinsaturados (AGPI) del 5 al 10 por ciento: este tipo de grasas ayuda a disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares y es el famoso Omega 3, que promueven las funciones del cerebro, reducen la inflamación al nivel celular y son cardioprotectores. El cuerpo no puede producir este tipo de ácidos grasos, por lo que su consumo es indispensable. Los pescados de agua fría como salmón, sardinas, atún, macarela o semillas de chía y linaza son las principales fuentes de este tipo de grasa. ¡Así que consume grasas saludables y disfrútalas!

//YAEL GREEN