//Axel Zuchovicki Mazkir Habonim Dror

A menudo me pregunto: ¿Por qué sigo invirtiendo tiempo en la tnuá? Es un hecho que, personalmente, podría realizar muchas actividades que parecieran más gratificantes (tan siquiera de manera directa) que un sábado de peulá, un majané, o toda la preparación necesaria para este tipo de eventos. ¿Por qué, hasta el día de hoy siendo un universitario, sigo regresando y activando dentro de la tnuá?

La primera vez que me surgió esta pregunta impactó sustancialmente a mi persona. Veía alrededor gente que empezaba a trabajar formalmente o realizaba distintos cursos que claramente les iba a ayudar en el futuro. Y… ¿qué estaba haciendo yo? En ese momento no es que estaba minimizando la gran labor social que hacen dentro de las tnuot. Mi pregunta iba más orientada a: “¿Qué estaba haciendo por mí, por mi futuro?

Al entrar a la universidad, empecé a destacar en áreas donde no sabía que sería mejor que los demás. Estudiando Ingeniería en Tecnologías Computacionales, esperas solo destacar en áreas como Matemáticas y Lógica en general. Sin embargo, me di cuenta que superaba notoriamente a mis compañeros en, para dar un ejemplo, liderazgo y creatividad. Formando equipos, era yo el que proponía ideas innovadoras dentro del grupo, y concretaba esta idea en planes de acción. Estar en una kvutzá desde chico, te ayuda, intrínsecamente, a saber trabajar en cualquier equipo y resolver problemas dentro de este. Más adelante, convertirte en madrij, liderando a tu propia kvutzá y conjuntamente al movimiento, te expone a una realidad que te necesita como líder. En ese momento, esta experiencia se vio completamente reflejada.

Además de esto, también destaqué realizando presentaciones orales. Dar peulot es prácticamente una presentación; te da herramientas sumamente importantes como fluidez, confianza y hasta técnicas de improvisación, todos elementos esenciales para un buen orador.

Estas cualidades son completamente tangibles. Este tipo de características son muy valoradas por los empleadores. Para mí, además de todo el involucramiento social, estar en la tnuá significó el desarrollo de estas facultades muy difíciles de construir. Una vez entendido esto, supe que la inversión de tiempo en la tnuá era una inversión sumamente importante también para mi futuro. Los invitamos a unirse a una de las tnuot de Moetzet, para que así inviertan ahora en su futuro.