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Canciones tristes para el Día de San Valentín

Centro Deportivo Israelita, A.C.

//Dalia Perkulis

Démosle una checada a canciones tristísimas con motivo del Día de San Valentín para aquellos que les gusta sumergirse en su soledad y tristeza como pulpos en su tinta en estas fechas. (Evitemos ese lugar común de “para los Grinch” del Día de San Valentín. Grinch, ese conocido duende verde que odia la Navidad y que fue creado por el escritor y artista gráfico Dr. Seuss). El Día de San Valentín se celebra cada 14 de febrero, como ustedes saben, y también se conoce como el Día del amor y la amistad.
Esta lista no tiene orden ascendente o descendente ni de ningún tipo, solo surgió por la tristeza que me produce oír cada vez, invariablemente, la siguiente canción que es la primera de la lista:

Lost cause, Beck
http://www.youtube.com/watch?v=-iEId2vmb0M
Por más veces que la escuche no deja de sumirme en un estado melancólico esta triste canción, que compuso Beck como parte de su disco Sea change (2002).
Cuenta la leyenda que el músico cachó a su querida novia en flagrante infidelidad y compuso en una sola semana y muy cerca de su trigésimo cumpleaños este álbum completo, uno de los más tristes de la historia, no me dejarán mentir, como catarsis y duelo de su pérdida amorosa. Lost cause es un digno representante del sentimiento de derrota que Beck plasmó en este álbum.
¡Ah, como agüita esta canción! Uno, al menos yo, no consigue hacerse inmune a sus poderes devastadores por más veces que la oiga. Recuerdo haberla escuchado con sobrepeso y tirándome a los carbohidratos con una sensación de derrota compartida con Beck que no habría de ceder, o así se sentía mientras tragaba y coreaba mentalmente uno de sus versos:
“Estoy cansado de luchar, luchar por una causa perdida…”
En mi caso significaba que nunca sería flaca ni dejaría de comer compulsivamente, pero llene usted el espacio en blanco de su causa perdida al escucharla y sumérjase en la conmiseración. La música con tristes instrumentos de cuerdas y el tono de voz de Beck le darán una ayudadita.
Este 14 de febrero, quién lo dijera, Beck va a participar con una canción romántica en un disco que se venderá en los Starbucks de Estados Unidos (ya es costumbre una edición especial de esta fecha), donde cada intérprete invitado hace un cover a una canción de amor y él eligió Love, de John Lennon. Dicen que le quedó increíble.
http://radioalterno.com/2013/12/beck-phosphorescent-ben-harper-en-compilado-de-san-valentin/
Qué se puede esperar de un músico que se dio a conocer con su sencillo llamado Loser:
“Soy un perdedor, soy un perdedor querida, así que por qué no me matas”.

Everybody hurts, R. E.M.
http://www.youtube.com/watch?v=ijZRCIrTgQc
El video. Tan desesperanzador, tan triste. Se trata de un embotellamiento vial multitudinario donde cada uno de los individuos atorados se enfrasca en sus reflexiones íntimas de lucha, fracaso y sus problemas cotidianos. La canción. D-os del álbum Automatic for the people (1992).
“Todo mundo sufre a veces… A veces todo está mal… Todo mundo llora a veces”.
Canción y video tienen también su parte reconfortante y esperanzadora: “Aguanta… No te des por vencido…”
El video tiene un mensaje redentor de emancipación ante el dolor y el trajín cotidiano.
En fin, cómo lloré y me hundí intencionalmente en el sufrimiento escuchando esta canción los últimos dos años y medio de la vida de mi padre, que pasó desahuciado con cáncer.
También R. E. M. tiene una canción ultraoptimista y alegre, para nuestro regocijo, que se llama Shiny happy people. Porque las bandas, como las personas, son polifacéticas.

Allapologies, Nirvana
http://www.youtube.com/watch?v=lYJPnQWJ3zk
Nota: Checar las palabras de Kurt Cobain al final.
Esta canción del álbum In utero, de 1993, contiene el que a mí me parece el verso más triste de todas las canciones del mundo:
“¿Qué más debería de ser? Todas mis disculpas”.
Para todos los que sentimos que no damos el ancho ante una persona, ante la familia o la sociedad, que podremos morir en la raya y nunca seremos suficiente. A mí me parece tristísima a más no poder.
Incluye otras frases grandiosas como:
“¿Qué más podría escribir? No tengo derecho…” (Escribir y derecho hacen un juego de palabras).
“Ojalá fuera como tú, fácil de sorprender…”
“Todo es mi culpa. Asumo la culpa desde mi vergüenza…”
“Estoy cansado, cansado, enterrado…” (Riman muy bien en inglés).
Y así, de otras monerías como estas va toda la canción.
Aderezada con el destino fatal de Kurt Cobain que muy congruente con sus composiciones se suicidó de un tiro porque nomás no se hallaba, esta canción que de por sí es desgarradora, se torna todavía un poco más. Dura, sórdida, desesperanzadora. Cobain convertido en canción. Un alarido de insatisfacción personal, general, universal.
Les dejamos el video de la versión en vivo del unplugged de Nirvana. El unplugged era un formato de recitales de diversos artistas que producía y transmitía “a fines del siglo pasado (XX)” la cadena de videos MTV, y consistía en que la banda tocaba sus éxitos adaptados a versiones acústicas. El unplugged de Nirvana (grabado en el 1993 y publicado en 1994, el año de la muerte de su líder) es el más visto y famoso de todos estos conciertos de artistas variados y ganó un Grammy como mejor álbum de música alternativa.

Hurt, Nine Inch Nails (NIN, por sus siglas)
http://www.youtube.com/watch?v=htmKZKR7oyc
Esta canción es perfecta. Y terrible. Es terriblemente perfecta y perfectamente terrible.
Contiene versos así:
“Me lastimé (pinché) hoy para ver si todavía siento
Me enfoco en el dolor, lo único que es real
En qué me he convertido, mi más dulce amigo
Todo el que conozco se va al final
Y tú pudiste tenerlo todo, mi imperio de mugre
Te voy a decepcionar, te voy a herir…”
Y así de alegre y romántica sigue hasta el final, como:
“Uso esta corona de mierda
Tú eres alguien más, yo sigo justo aquí…”
Su letra, su música, su tono, todo es perfecto. Y es terrible su contenido. Es más intensa y existencialista que la mismísima Náusea, de Jean Paul Sartre. Escrita por su líder Trent Reznor, Hurt es una canción de Nine Inch Nails publicada en el álbum The down ward spiral (1994).
Seguramente después de componer esta (estoy especulando) vino la inspiración para escribir Closer (mismo álbum) y ‘salirse de él mismo’. Una canción que habla del deseo sexual en su forma instintiva, elemental, mamífera, carnal, primitiva, del sexo evasivo de la mente. Y así.

Something I can never have, NIN
http://www.youtube.com/watch?v=UEW8riKU_tE
Otro sencillo desolador de NIN es Something I can never have (del álbum Pretty hate machine, 1989). Es parte de la banda sonora de Asesinos por naturaleza (Oliver Stone, 1994) y dice cosas así:
“Solo quiero algo que nunca puedo tener”, refiriéndose a un amor imposible, obvio, y tiene otros dardos en su letra como “gris sería mi corazón si tuviera”. “Haz que esto se me quite, voy por una sola cosa y estoy empezando a asustarme. Haz que esto se me quite, solo quiero algo que no puedo tener”.
Con un piano maestro a manos del mismo Trent Reznor y su voz –gritos de repente– de desesperación.

Hurt, Johnny Cash
Es un cover que Johnny Cash le hace a la canción de NIN arriba mencionada y aplica el mismo tono desgarrador, solo que se suma el factor ‘vejez de una leyenda musical cantando esta rola en las postrimerías de su vida’. Es Hurt desde la voz (literalmente) vieja, cansada, de un hombre maduro despidiéndose de la vida. Aunque se trata de una figurota en la escena musical y no de su ocaso, ya que Cash ‘el hombre de negro’ la grabó en la cima de su reconocimiento público como artista. Es una versión melancólica por donde se le vea.

Creep, Radiohead(1992)
http://www.youtube.com/watch?v=90uSWWuneWU
Esta canción no necesita presentación, al menos para los que tenemos más de treinta años. Es un himno al inadaptado. Al ‘cretino’, traducción de creep.
Habla de un don Nadie, alguien raro, un fenómeno, un tullido social, o al menos así se expresa de sí mismo el ‘narrador/intérprete’ que quiere todo y sabe que no obtendrá nada. De un amor platónico, obvio. Es parte de la banda sonora de El triciclo, una de las películas más deprimentes y desesperanzadoras que he visto en mi vida, lo digo sin titubear (del director Tran Anh Hung, 1995). Se trata de un muchacho paupérrimo que maneja una bici-taxi en Vietnam y de su imposibilidad de emerger de la pobreza, violencia y marginación que lo asfixian.

Hey you, Pink Floyd
Del álbum The wall (de 1979 y la película homónima de Alan Parker, 1982)
http://www.youtube.com/watch?v=TFjmvfRvjTc
En realidad todo el álbum The wall que es el argumento de la película musical del mismo nombre aplica a música deprimente y desoladora, pero tomamos el corte Hey you como muestra. El disco y la película The wall tratan de lo más bajo que puede caer el hombre en su búsqueda existencial: la guerra, el asesinato, el fascismo, el borreguismo. Es sobre la descomposición social que conduce a la descomposición individual y viceversa.
“Hey tú, ahí afuera en el frío, quedándote solo, haciéndote viejo
¿Puedes sentirme?
Hey tú, ahí afuera solo, sentado desnudo en el teléfono
¿Quieres tocarme?
Hey tú, con tu oído contra el muro, esperando alguien a quien llamar afuera
¿Quieres tocarme?…
Hey tú, me ayudarías a cargar la piedra
Abre tu corazón que ya vengo a casa…”
Y esta letra se intercala con solos de guitarra característicos de Pink Floyd, esos que calan hasta el tuétano.

Perlas, El columpio asesino
El columpio asesino es una banda de Pamplona, España, que presenta esta canción, la más joven de nuestro conteo, en su más reciente disco Diamantes, de 2011.
http://www.youtube.com/watch?v=aQqbCCpBJcI
Esta canción la oí, como casi todo lo que oigo en la radio y me impactó tanto que me fui a buscarla y a escucharla por mi cuenta para corroborar que había entendido bien y sí, en efecto, es mega triste. Dice así:
“Han sido tantos los errores acumulados que podría hacerme un collar, un collar de perlas, de grandes perlas premiadas, así son mis perlas, mis perlas acumuladas…
Sé que no lo hice bien, ahora sé que mal es lo mejor que lo puedo hacer
No pretendo arreglar el daño que está hecho ya
Pero por favor ábreme la puerta hoy
Por favor concédeme tregua hoy…”
Una digna canción de un perdedor. No se la pierdan. Es desgarradora y hermosa. Su letra, su música, la atmósfera. Escúchenla.

Yo no nací para amar, Juan Gabriel (1980)
http://www.youtube.com/watch?v=0KPDB_Sil5I
Así dice tal cual: “Yo no nací para amar, nadie nació para mí”. No requiere mayor explicación. Pero escúchenla. Les aseguro que no tienen presente toda la autoconmiseración que contiene su letra.
http://www.musica.com/letras.asp?letra=125203
Y la mayoría de la discografía de Juan Gabriel, así como la de Pink Floyd, podría incluirse en esta lista.

Disfruten pues.
Feliz Día de San Valentín. Feliz mes del amor.

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