Rishi Sunak, que será el nuevo primer ministro británico tras convertirse en líder del Partido Conservador, es considerado un firme defensor de Israel y un amigo de la Comunidad Judía del Reino Unido.

En un acto de los Amigos Conservadores de Israel celebrado en agosto, Sunak declaró que Jerusalem es «indiscutiblemente la capital histórica» de Israel y que había un «argumento muy sólido» para trasladar la embajada del Reino Unido desde su actual ubicación en Tel Aviv.

«Es algo que me gustaría hacer», señaló.

Sin embargo, Sunak, antiguo responsable del Tesoro también reconoció las «sensibilidades» sobre el tema. «Si fuera tan fácil, ya se hubiese hecho», explicó.

El nuevo primer ministro hizo estas declaraciones durante su fallida candidatura al liderazgo frente a Liz Truss, cuya dimisión como primera ministra la semana pasada, tras una tumultuosa etapa de seis semanas en el cargo, allanó el camino para la elevación de Sunak a líder, después de que su único aspirante al puesto se retirara de la carrera.

Truss comunicó el mes pasado al primer ministro israelí, Yair Lapid, que estaba estudiando el posible traslado de la embajada del Reino Unido a Jerusalem, pero no acabó actuando al respecto durante su breve y récord mandato.

También durante el pasado verano europeo, Sunak aclamó a Israel como un «brillante faro de esperanza» en una entrevista con el Jewish Chronicle. Y al escribir para el UK Jewish News, colaborador de The Times of Israel, manifestó su oposición al movimiento palestino Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS).

«Seguiré apoyando el proyecto de ley del BDS, que impedirá a los organismos públicos participar en boicots que socavan la cohesión de la comunidad judía», afirmó Sunak en julio.

«La Comunidad Judía hace bien en denunciar a quienes pretenden perjudicar al único Estado judío del mundo», agregó.

Sunak también advirtió que estaba preocupado por el aumento de los incidentes antisemitas en el primer semestre de 2021.

«Este no es un tema para ser equívoco: todos en el parlamento y en el país deben adoptar una posición firme sobre la eliminación del antisemitismo y estoy decidido a asegurar que este flagelo en nuestra sociedad sea erradicado», manifestó en aquel momento el nuevo primer ministro del Reino Unido.

Sunak, que se espera que tome posesión de su cargo el martes, será el primer primer ministro británico de color y su primer líder hindú, un hito para un país con un extenso pasado colonial, y que sigue siendo discutido.

Los retos a los que se enfrenta Sunak, el tercer primer ministro del Reino Unido este año, son enormes: debe intentar apuntalar una economía que se desliza hacia la recesión y que se tambalea tras el breve y desastroso experimento de economía libertaria de su predecesora, a la vez que intenta unir a un partido desmoralizado y dividido que va muy por detrás de la oposición en las encuestas de opinión.

En su primera declaración pública, Sunak expresó: «El Reino Unido es un gran país, pero no hay duda de que nos enfrentamos a un profundo desafío económico».

«Ahora necesitamos estabilidad y unidad, y mi máxima prioridad será unir a nuestro partido y a nuestro país», concluyó Sunak, que a sus 42 años se convertirá en el primer ministro más joven de Gran Bretaña en 200 años. 

Fuente: Agencia AJN.