Mi Cuenta CDI

La Independencia de Texas

Centro Deportivo Israelita, A.C.

//Diana Kuba

En el artículo anterior se dio una introducción de los intereses expansionistas de los Estados Unidos en su frontera Sur con México y hacia el Oeste, con objeto de llegar al Océano Pacífico y fundar un puerto que los comunicara con Asia. También se vio cómo se compraron las tierras de la Luisiana y las Floridas, y cómo inició la colonización de 300 familias estadounidenses en Texas, bajo auspicios de la familia Austin. Finalmente, se dijo que para 1830, la inmigración ilegal de estadounidenses a Texas empezó a ser insostenible, y esta región se convirtió en un foco rojo para la incipiente República Federal mexicana.

Para 1831, el general Manuel Mier y Terán le escribió al Ministro de Relaciones, Lucas Alamán, que la situación de Texas era alarmante, que no se hablaba español, que no se predicaba únicamente la religión católica -sino la protestante- y que el esclavismo continuaba extendiéndose. Además, los texanos seguían sin pagar impuestos y con permiso de importar libremente lo que necesitaran. Por tanto, se planeó una empresa de colonización mexicana para contrarrestar esa fuerza, pero esta fracasó, la gente de distintos estados mexicanos no quiso emigrar a esas tierras lejanas y probar suerte.

Además, Alamán expidió una ley para restringir la colonización estadounidense. Ante el descontento de los colonos texanos por esta ley, el segundo embajador de Estados Unidos en México, Butler, ofreció comprar Texas, como habían comprado antes la Luisiana a Napoleón, y las Floridas a España, pero México no aceptó el contrato de compraventa. Ante esta negativa, Estados Unidos en representación de Butler, convirtió algunas reclamaciones aisladas por daños sufridos por ciudadanos estadounidenses en México durante las diversas revueltas, en un instrumento de presión diplomática, pero México continuó rehusándose a la venta. Sin embargo, estas quejas serían el pretexto en 1846 del presidente Polk, para declarar la guerra a México, ya que se había aceptado la anexión de Texas a la Unión Americana.

Para 1833, cuando Santa Anna era el presidente ausente y Valentín Gómez Farías era vicepresidente de la República Federal, Esteban Austin, hijo de Moisés, vino a la Ciudad de México para solicitar los permisos del cierre de aduanas, tres años más libres de impuestos, títulos de propiedad para los inmigrantes que habían entrado sin permiso-que ya no eran 300 familias, sino 24 700 habitantes anglosajones- y la erección de Texas como estado soberano. Solo que llegó exactamente cuando los ‘hombres del progreso’ estaban dictando las reformas anticlericales, y nadie le hizo caso debido al caos político que reinaba en el país. Por eso escribió a los texanos estadounidenses que se desentendieran del gobierno de la capital y que empezaran a formar sus propios ayuntamientos. Esta carta fue interceptada y se le aprehendió. En 1834 Santa Anna lo liberó y le explicó que no se podía erigir un estado en Texas por no contar con la población requerida por la ley. Austin regresó a Texas, vía Nueva Orleans para comprar armas para sus paisanos, aunque seguía leal al gobierno mexicano.

Cuando llegó a Texas se dio cuenta que Samuel Houston, exgobernador de Mississippi ya lo había sobrepasado en poder y que este sí tenía más fuerza sobre el grupo texano norteamericano antimexicano, deseoso de separarse de México. Por eso, cuando en 1835 se suspendió la Constitución de 1824, los texanos declararon que mientras prevaleciera el centralismo se separaban de la federación, hasta que se volviera a establecer el federalismo. En 1836 declararon como presidente a David L. Burnett y a Lorenzo de Zavala como vicepresidente.

Ante esto, Santa Anna salió con 6 000 hombres rumbo a Texas, sin experiencia en guerra, ni dinero para alimentarlos. Tuvieron una primera victoria en el fuerte del Álamo, en San Antonio Béjar, pero después cuando Santa Anna hizo descansar al ejército en San Jacinto, fueron sorprendidos por los colonos y derrotados. Incluso Santa Anna fue hecho prisionero y lo llevaron a Galveston donde tuvo que firmar los Tratados de Velasco. Con esto Texas logró su independencia y se convirtió en el dolor de cabeza en los siguientes diez años de los distintos gobiernos mexicanos, que no tenían la capacidad de mandar y pagar a un ejército mexicano para recuperar este territorio.

1) Para esa época, la religión católica funcionaba como un elemento de identidad “nacional” en el México que acababa de independizarse.
2) Para esa época, Texas era una región que formaba parte del estado de Coahuila.
3) En el ínterin de estas dos batallas, Santa Anna mandó fusilar en Goliat a 300 texanos anglosajones por sus intentos independentistas, cuestión que esta colectividad no perdonó.

Los orígenes de Sucot

La Guerra contra Estados Unidos. Expansionismo y Colonización de Texas. Primera parte de la Guerra entre Estados Unidos y México

¿Un México agrícola o industrial? Pregunta crucial del siglo XIX

La República Central. Tercera parte y última de este periodo

La República Central. Segunda parte

La República Central. Primera parte

Inicios de la primeras República Federal (Quinta y última parte)

Inicios de la primeras República Federal (Cuarta parte de cinco)

Inicios de la primeras República Federal (Tercera parte de cinco)

Inicios de la primeras República Federal (Segunda parte de cinco)

Inicios de la primeras República Federal (Primera parte de cinco)

Dificultades en los inicios de la vida Independiente Mexicana (Cuarta y última parte)

Dificultades en los inicios de la vida Independiente Mexicana (tercera parte)

Dificultades en los inicios de la vida Independiente Mexicana (segunda parte)

Dificultades en los inicios de la vida Independiente Mexicana (Primera parte)

Desafíos para la búsqueda del nuevo ser nacional mexicano (segunda parte)

Desafíos para la búsqueda del nuevo ser nacional mexicano (primera parte)

Consecuencias sociales después de la lucha por la Independencia

Consecuencias económicas de la lucha por la Independencia

El movimiento de Iturbide y la consumación de la Independencia

El movimiento Revolucionario de Miguel Hidalgo y Costilla

Los deseos autonomistas antes de la independencia (Segunda parte)

Los deseos autonomistas antes de la independencia (Primera parte)

Sorpresas y valores de familia

Jóvenes judeomexicanos visitan proyectos Wizo en Israel

Propuestas de Piketty en el capital en el siglo XXI (cuarta parte)

Propuestas de Piketty en el capital en el siglo XXI (tercera parte)

Propuestas de Piketty en el capital en el siglo XXI (segunda parte)

Propuestas de Piketty. El capital en el siglo XXI

Éxito de Israel ante la lucha contra la sequía

Lo indescriptible e imprescriptible de la Shoá

Riesgos al idealizar un proyecto de nación

Importancia del voluntariado en organizaciones sociales comunitarias como forma de participación ciudadana

Ayotzinapa, ejemplo de arbitrariedad e impunidad acumuladas

¿Gobernar y cumplir o promover la imagen pública?

Identidad y diversidad dentro del problema Israelo-Palestino

Reformas de estado y operatividad

El peso de los hábitos en la política mexicana

Cultura y fe

Diálogo entre Liberalismo y Socialismo

El espíritu religioso

Israel ¿una democracia?1

Rescatar a la cultura con “C” mayúscula

Redefiniendo el concepto de cultura

Efectos de la primacía de una cultura

Mensajes de la Shoá para la contemporaneidad

Apañando a las jovencitas antes que caigan

Empoderamiento de la mujer dentro del ejército Israelí

Árbol de olivo

Los Armenios de Israel

Compromisos cumplidos, labor de WIZO en México

Israel ¿una democracia?